Fue la sede de la orden mercedaria descalza desde 1638, la cual, como tantas otras, sufrió las vicisitudes de las desamortizaciones deciminicas de los liberales isabelinos.
Formó parte del desaparecido convento de mercedarios descalzos quienes, procedentes de la iglesia de Santa Ana se trasladaron en 1638 a este lugar. Construida en sillares, ladrillo y mampostería, esta iglesia fue edificada en el primer tercio del siglo XVII y se terminó en el sigloXVIII. Consta de una sola nave con planta de cruz latuina. El cuerpo de la nave está compartimentado en seis tramos a través de pilastras toscasnas. Está cubierta con bóveda de cañón con lunetos y cúpula sobre chinas en el crucero.
Exteriormente la portada, de cantería, que se construyó a la vez que el resto del edificio, presenta arco de medio punto flanqueado por parejas de columnas toscanas adosadas sobre pedestales. Por encima de estas columnas hallamos un entablamento quebrado adornado con triglifos, que da paso a un frontón recto y roto que alberga una hornacina con una escultura en barro de la Virgen de la Merced que da nombre a la iglesia.
La sacristía situada tras el prebisterio, y adosada a la cabecera, presenta la siguiente estructura: es de planta rectangular y cubierta por medio de bóvedas de arista. Sobre la sacristía se encuentra el camarín de la Virgen de la Merced que data del último tercio del siglo XVIII.Su estructura también es de planta rectangular y está compartimentada en dos ámbitos cuadrangulares separados por medio de una columna de mármol.
Consta de antesala, cubierta con bóveda vaída ochavada y decorada. La sala principal se compone de un espacio central cuadrado cubierto con cúpula de escayola con pijante central y dos laterales cubiertos con bóvedas nervadas de arista. El conjunto está decorado con yesrerías a base de rocallas, cartelas, ángeles y pájaros.
El retablo mayor, del último tercio del siglo XVIII, está compuesto por banco y dos cuerpos de tres calles compartimentadas por estípes. El retablo está sin dorar y presenta una hornacina central con una imagen en candelero de la Virgen de la Merced, de la misma época del retablo al que está dedicado. En el segundo cuerpo y en los laterales, Santos de la Orden Mercedaria, entre otros.
El retablo central del brazo izquierdo del crucero o del lado del Evangelio, data de mediados del siglo XVIII. El cuerpo inferior se encuentra sin dorar y está compartimentado por medio de estípites. Consta de dos cuerpos y una calle y alberga una escultura de la Dolorosa del último tercio del sigloXVIII aunque se repolicromó un siglo después.
En su parte izquierda hallamos otro retablo de finales del siglo XVIII, con una hornacina en su centro flanqueada por estípites que acoge un grupo escultórico de la Sagrada Familia, en el cual data del último tercio del siglo XVII, en madera estofada. En el ático, el lienzo de la Dolorosa.
Dos retablos encontramos en el brazo del crucero. Dentro del situado en el centro localizamos imágenes de candelero de la Virgen Dolorosa, un Crucificado y un San Juan que pertenece a la cofradía del Calvario y Nuestra Señora del Mayor Dolor. En el mismo brazo, a la izquierda,María Magdalena, reciente y moderna. El del lado izquierdo es de finales del XVIII y en él descubrimos una escultura de San Ramón Nonato, del segundo cuarto del siglo XVIII en madera estofada. Contiene en el ático un lienzo de San José.
Entre las distintas piezas de orfebrería enumeramos las siguientes: un ostensorio de bronce dorado del primer cuarto de siglo XVII, un cáliz de plata liso de 1791 que presenta los punzomes de la ciudad de Córdoba, de los plateros Martínez y Santa Cruz.
En la nave, diversos lienzos de la Virgen de Guadalupe, San Jerónimo, Jesús y la Samaritana, las Ánimas Benditas, Santa Catalina, etc.
La iglesia de la Merced es otro exponente de las cuantiosas fundaciones de órdenes religiosas acometidas en la localidad a iniciativa e instancia de personalidades de la aristocracia y la burguesía agraria. En este caso fue la sede de la orden mercedaria descalza desde 1638 la cual, como tantas otras, sufrió las vicisitudes de las desamortizaciones decimonónicas de los liberales isabelinos.
Conserva el templo que no así otras dependencias conventuales. La planta es de cruz latina y bóveda de cañón como otras tantas de la misma orden. Sobresalen la sacristía y el camarín de la Virgen de la Merced del siglo XVIII. A ello debe añadirse la escultura de uno de los santos de congregación: San Ramón Nonato.
Actualmente es parroquia restando pocos elementos de la primitiva fundación conventual.
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La Oficina de Turismo de Morón de la Frontera se encuentra ubicada en parte de las dependencias de un convento del siglo XVII, anexo a la Iglesia de Santa Clara y en pleno corazón de Morón de la Frontera, junto a los Jardines de la Carrera, en Calle Utrera, Nº 1.Esta oficina de turismo ofrece a todos sus visitantes información turística de Morón de la Frontera y su entorno así como de la oferta turística más destacada de de los principales destinos turísticos de España. Atiende diariamente a turistas, excursionistas y a la propia población local, ofreciendo una información fiable, clara y precisa en diferentes idiomas, de forma accesible y personalizada.Este espacio, además de la Oficina de Información Turística de la localidad, ofrece una zona expositiva y cultural para deleite del visitante, todo ello en una espectacular nave de dos plantas que conserva el antiguo artesonado de madera del siglo XVII