Hidrografía

Otro elemento destacable entre el patrimonio natural del Morón es el río Guadaíra. Este curso fluvial que atraviesa la provincia de Sevilla desde el suroeste, pasando por algunos de sus núcleos como la Aldea Guadaíra o La Ramira. Tiene su origen en la zona serrana conocida como Pozo Amargo, cercano al término municipal de Morón de la Frontera, desde donde parte hacia el Guadalquivir atravesando los términos municipales de Arahal, Alcalá de Guadaíra, Dos Hermanas, Coria del Río y Puebla del Río. Está sometido a fuertes impactos que degradan su estado natural, debido a la gran cantidad de industrias y actividades agrícolas. En otras áreas, en la que los impactos no son tan acusados , es posible apreciar plantas herbáceas, arbustivos, trepadoras, lianas arbóreos tales como: álamos, tarajes, sauces, chopos, olmo, fresnos y eucaliptos. Dentro de los  herbáceos y arbustivos: adelfas, aros, juncos, carrizos, rosales silvestres, zarzas, majuelos y zarzaparrillas.

En cuanto a la fauna asociada al Guadaira; la carpa habita, barbo boga,...y como anfibios perduran la rana común, sapo corredor, y el galápago europeo. En cuanto a las aves, podemos localizar especies como: la garcilla bueyera, la garza real, el carricero o la cigüeñuela entre otras.

El término municipal de Morón también es atravesado por el río Peña, de curso intermitente, que recorre la campiña moronera de sur a norte. Además, la localidad está limitada al norte por dos arroyos, denominados del Sillero y del Cuerno, situados al noreste del núcleo urbano de Morón de la Frontera.

El Río Guadaíra es un afluente del Río Guadalquivir con una extensión de unos 110 kilómetros que fluye por las provincias de Cádiz y Sevilla. Tiene su nacimiento en la sierra de Pozo Amargo, en Puerto Serrano discurriendo casi la totalidad del río por la provincia de Sevilla hasta desembocar en el río Guadalquivir en el término de la Puebla del Río. Su cuenca hidrográfica se extiende por los numerosos términos municipales como Morón de la Frontera, Arahal, Alcalá de Guadaíra, Dos Hermanas y Mairena del Alcor, entre muchos otros debido a su larga extensión. Sus afluentes principales son los ríos Guadairilla, Alameda, Salado y Saladillo.

El río Guadaíra es, hoy por hoy, un área de gran importancia para la avifauna, no solo en España sino también en Europa, al estar jugando un papel vital como área de descanso y alimentación para las aves que están migrando. 

Es una zona importante de invernada para especies como el escribano palustre o el pechiazul, las cuales crían en el norte de Europa, a la vez que es una importante zona de reproducción para especies como el carricero común y el carricero tordal, especies que atraviesan el Sahara para pasar el invierno. En las orillas de este tramo del río se desarrolla una amplia franja de vegetación emergente constituida por especies como la enea, el carrizo o el taraje.

El grupo faunístico más relevante son los peces, existiendo una gran diversidad piscícola, representada por especies de gran singularidad como pardilla, colmilleja o calandino. En el grupo de los anfibios y reptiles destacan sapillo pintojo meridional y galápago leproso. También es posible encontrar grullas  y mamíferos característicos de ecosistemas fluviales como la nutria.

Desde el nacimiento del río hasta las cercanías a la localidad de Morón de la Frontera, el río discurre por una zona de origen Triásico con una litología de margas yesíferas, originando morfologías de colinas. 

La principal vía pecuaria del entorno del Guadaíra es la Cañada Real de Morón de la Frontera a Sevilla, que conecta dichas localidades a través del núcleo de Alcalá de Guadaíra y transcurre de forma paralela al río durante la mayor parte de su recorrido. Desde esta vía pecuaria parten otras tantas que en dirección norte-sur atraviesan el río (Vereda del Río Tinto, Cordel de Utrera, Cola-da de Pelay-Correa, etc.). 

A tenor de los valores de calidad y fragilidad paisajística a lo largo del río Guadaíra, aparecen cuatro tramos. El primer tramo se sitúa entre el nacimiento del río y las proximidades de la localidad de Morón de la Frontera. En este tramo, además de localizarse edificaciones con valor patrimonial y sociocultural (antiguos balnearios y molinos), el estado de conservación de las riberas puede calificarse como bueno en su conjunto. Así el tramo presenta una significativa calidad ambiental y paisajística. Debido a la proximidad de Morón de la Frontera y de varias infraestructuras de comunicación que atraviesan el cauce, la accesibilidad e intervisibilidad son altas, incrementándose significativamente la fragilidad en dicho tramo.

 El segundo tramo se sitúa entre Morón de la Frontera y la desembocadura del arroyo del Salado. Lo más destacado de este tramo es la poca accesibilidad e intervisibilidad del río, propiciada fundamentalmente por la lejanía a núcleos de población. La ausencia de presiones antrópicas ha sido determinante en el buen estado de conservación que presentan las riberas. 

  El río de la Peña es un afluente del río Corbones que nace a unos 3 Km al oeste de la Romera , pedanía donde se le une el arroyo del Morisco. Buscando desniveles pasa a los pies de la Sierra de Peñagua y pocos metros más abajo forma la piscina natural conocida como Charco Charcal. En este punto gira 180º y toma dirección oeste, hasta su desembocadura en el río Corbones en el  paraje conocido “la junta de los ríos”, Una peña,un puente y el manantial de la Teja son testigos.

En cuanto a los arroyos, el arroyo del Cuerno, tras el cruce de la SE-451, se divide en dos ramales. El primero de ellos está encauzado mediante tubo de hormigón armado de 1.500 mm cegado en su cabeza, atravesando el núcleo urbano de Morón para posteriormente unirse con el segundo ramal en las inmediaciones del Polígono Industrial La Estación. El segundo ramal continúa hasta la cantera abandonada de Canillas, que forma parte del cauce, y tras su salida discurre de forma paralela al vial existente en las proximidades de las Barriadas Rojas Marcos y El Pantano hasta la unión con el Arroyo Sillero, estando los últimos 87 metros encauzados mediante sección rectangular de hormigón armado de 2,00 m de ancho libre y 2,20 m de calado máximo. Desde la incorporación del Arroyo Sillero al Arroyo del Cuerno, este último continúa encauzado con una sección similar a la descrita anteriormente y, bordeando el núcleo de Morón de la Frontera por el Norte, se une, tras cruzar varias vías de comunicación, con el ramal  entubado del Arroyo del Cuerno. 

Por otra parte, también se encuentran otros arroyos  como el de san Cristóbal y  el de Barros. El “arroyo San Cristóbal  nace a pie de la finca el Pontón, a unos 2,5 Km del pueblo por la carretera A-406 (Morón - Pruna).Se dirige al pueblo paralelo a la carretera y justo antes de llegar a la Atalaya gira bruscamente a dirección este, entrando así el promontorio sobre el que se asienta la población. En el tramo que comprende desde la carretera Morón-Pruna hasta la carretera que lleva a la Ermita de Jesús de la Cañada, este arroyo formaba unas pozas no muy profundas, de las que se extraían barro para la actividad alfarera, de un color sumamente rojizo, como también lo eran los barros de la cantera del Calvario, cercana a la Plata.

Rodea el pueblo por su flanco sur, buscando la vaguada del río Guadaira, en paralelo a la carretera A-8126 (Morón – Coripe).En este punto se le une un arroyo, que llega aquí sotorrado,  conocido como “Arroyo de la Plata”. Aproximadamente un  1,5 Km más abajo, detrás de la vente de Esparteros, se une al Guadaíra.

El arroyo de los Barros nace como regato en una parcela de los olivos de la finca de la Vigía, a 1 Km aproximadamente en dirección oeste de la urbanización Valleverde. Desde aquí a su desembocadura siempre sigue dirección oeste. Un kilómetro más abajo de donde se conforma, se une al arroyo Salado, saliendo del término de Morón para adentrarse en el de Arahal.

Su recorrido lo efectúa por parcelas de las fincas La Vigía, Barros Viejo y Caballero, éstas de Morón; el Carrascal, el Carmen, la Gallina a medias con el Fresno, todas de Arahal.

A 2 km, antes de su desembocadura, cruza la carretera SE-5204 (Base Aérea ) y a 800 metros, de dicho encuentro se le une el arroyo del Carrascal.

Su aporte al Guadaíra se realiza cuando este está demarcando los límites de la Base Aérea por su flanco noroeste.